domingo, 22 de abril de 2018

¿Y SI NOS DEDICÁRAMOS A ORIENTAR AL PASO?


Es un lunes de abril, he salido presurosa con un libro de compañía para el trayecto porque el viaje será largo.
Abordé un vehículo y me hallé junto a una mujer joven, con una bebé en brazos que aferraba como temiendo se la arrebataran. Mientras pregunta al chofer si   falta mucho para el Poder Judicial. Él  responde: "Señora ya le dije que es en el paradero dos". 
Nosotros aún estamos por el paradero doce. La miro, mientras pienso que se dirige al mercado de la ley donde la justicia se compra y vende; dudo recordando que Rodrigo me dice que me meto donde no me llaman, Janet que sólo debo ayudar cuando me lo piden, pero puede más mí ser, así que pregunto: ¿Vas por pensión de alimentos?
Me mira con unos ojos marrones que destaca en su piel casi transparente,  sus ojos brillan con ese dolor que antecede al llanto, mientras hace un esfuerzo y me responde: "Si es por pensión de alimentos, y no sé nada".
A mi vez la miro y sonrío animándola para impedir que brote el llanto. Le digo: "¡Es bueno lo que has decidido! A quién no cumple con su obligación hay que obligarlo, no te preocupes todo va a salir bien, ahora hay más leyes que te protegen a ti y tu hija, de cuando tú o yo éramos niñas. Pero si no sabes nada, mejor baja en el siete,  allí está el Centro de Emergencia Mujer, 
para que te asesoren, oriente y apoyen según sea tu caso.  No te cobrarán nada porque es del Ministerio de la Mujer: Tampoco es una caridad, es tu derecho y de tu hija,   para eso pagamos a todos(as) los funcionarios con nuestros impuestos. Siempre hay un(a) abogado(a), una trabajadora social y un psicólogo(a)".
Me mira, con esa mirada que nos conecta a las mujeres, sin decir nada, pero significando que has hallado a alguien que responde a tu necesidad, en el momento preciso. Estamos a la altura del paradero siete, soy yo quien le dice al chofer: "Señor pare cruzando el siete, la señora con bebé baja en el CEM". El chofer me mira, intenta ignorarme y pregunta, a la señora: "¿Qué ya no va al poder judicial?".  Yo le digo: "No se preocupe, en este edificio la atenderán bien".
El Chofer me mira por el espejo retrovisor, el pasajero que está a su lado, voltea y me mira luego, vuelve la cabeza para mirar con desdén a la joven mujer que se aleja con su bella bebé en brazos, el estudiante que está a mi lado juega con su celular, con él no es. 
Me quedo sola en medio de tres hombres que deben pensar que soy una bruja mientras se solidarizan con el padre ausente, aquel hombre igual que muchos que no asume la responsabilidad de su prole, el verdadero machista que muchos confunden con el sexista, porque el machista es aquel que usa y cosifica a la mujer igual que el sexista, pero a diferencia de él, al machista no le importa el hijo o la hija
Por mi lado, decido ignorarlos, en eso soy buena,  recurro a mi mejor espanta hombres, como diría mi nieta Mayu, saco mi libro del bolso y me pongo a leer. ¡Claro que funciona!, ellos cambian de gesto y me ignoran, una mujer que lee es peligrosa.
Es las tres de la tarde, le robo tiempo al tiempo, he ido por seis libros para nuestro círculo de lectura, me muero de sed así que voy por un jugo de naranjas. La expendedora está llena de llanto, y su compañera le dice: “Tienes que denunciarlo”. Yo la miro y pregunto: “¿Tienes problemas con tu esposo?”.
Ella responde: “Ya no es mi esposo, hace cinco años que nos hemos separado, él se fue con otra mujer, pero no me deja en paz, es borracho, no le da la pensión a mis hijos, siempre quiere que vaya a cobrar mi hija que tiene quince años como si fuera su obligación, yo he abierto una cuenta para que me deposite y nada, he hablado de buenas maneras diciéndole que cumpla como padre, y no entiende. Cuando va a mi casa con el pretexto de la pensión se pone a tomar con sus amigos y nunca deja el dinero”.
Su amiga, de esas solidarias con las cuales no necesitamos enemigas, añade: “Ella siempre le habla bonito y él siempre le miente, le estafa, le restriega en la cara con su amante. Ella pone de pretexto que no tiene dinero para un abogado, para no hacerle  juicio, solo quiere que él cumpla a las buenas. Y él quiere volver con ella a la fuerza, sólo por un momento, para darle la pensión.”  
La mujer me ofrece el jugo, mientras desgrana todo su drama, yo escucho con atención y preguntas para entender mejor su historia, que para mi no es nueva, sólo tiene algunos acentos, matices, dolor; pero lo suficiente para entender que estoy ante una mujer que ama demasiado.
Finalmente le digo: “Mujer lo primero que tienes que preguntarte, es si quieres en verdad defender el derecho de tus hijos e hija o quieres ser “buena gente” haciendo que tu ex, deje de beber, tienes que preguntarte si tú lo quieres cambiar. Parece que no terminas de aceptar que él hace buen rato ya te cambió. Te has preguntado ¿Por qué quiere que tu hija de 15 años le vaya a cobrar?” 
Ella responde: “Por eso mismo lloraba porque coloca a mi hija en condición de mendiga”.
Yo insisto, “Tu mayor preocupación es su alcoholismo de él, y la parte material, olvidando que tu hija mayor está en riesgo ante él o sus compañeros de vicio, recuerda que a diario vemos y escuchamos, como un padre, abuelo, tío, vecino, hermano, destrozan la vida a niñas y adolescentes. Para que te dé una pensión de alimentos que es su obligación, no necesita verte ni que nadie le cobre, el juez sentencia cuál es el monto que él debe depositar en el Banco de la Nación, y si no cumple, hoy puede ir preso, si no tiene trabajo y no cumple, sus padres tienen la obligación de asumir esa responsabilidad".
Ella responde: "No crea yo tengo mucho miedo de eso, no de él pero si de sus amigos, mi hija ya está grande y el borracho no la va a poder defender, y no se que hacer".
La miro y aun dudando le digo: "Si en verdad estás decidida a defender los derechos de   tu hija e hijos, ve al Centro de Emergencia Mujer que está cerca a tu casa, allí te pueden ayudar, orientar y quien sabe hasta hacerte fuerte”.
Ella responde: “Yo vivo en ATE, mañana mismo iré, muchas gracias señora y por el jugo no se preocupe, ya me pagó”. Yo le digo: “¡De ningún modo, es el ingreso para tus hijos!”.
Me mira agradecida y dice: “No señora, necesitaba una abogado y usted ha sido mi abogada, psicóloga y ángel, un jugo de naranja es lo menos que puedo ofrecer ante un milagro, me ha quitado el dolor de este y muchos días. Déjeme que agradezca a Dios a mi modo”.
La miro conmovida, por esa cultura nuestra de reciprocidad, provocándome sentimientos que me desbordan, colocándome en ese estado al que llamo felicidad. Me despido, me voy con mis libros a cuesta, recordando la magia de este día que cierra,  donde fui instrumento del universo para retorné la serenidad a los rostros de angustia y dolor de dos mujeres que se cruzaron en mi camino, tan distintas en sus historias,  con los mismos pesares y necesidades, con las mismas carencias y urgencias. Con la misma desinformación y desconocimiento de sus derechos.Camino en medio de una tarde que se acentúa, el ruido silencia mis pasos.Vuelvo a sentir esa sensación de plenitud de los noventa cuando publicitaba por calles, plazas, mercados y dependencias sobre la necesidad de desenmascarar a una dictadura encubierta. De eso hace más de dos décadas, mientras me digo: "¡Sigo siendo bruja para unos, guerrera para otros, impertinente para los míos! ¡Allá ellos!, para mi es mi modo de vivir,  funcionó, funciona y funcionará mientras esté en esta dimensión.
En ese momento me pregunté, y  en este momento  que  escribo, te pregunto a ti que me lees: ¿Y si nos comprometiéramos en una cruzada cotidiana de orientación al paso, a las mujeres en sus derechos, sistemas, servicios y medios de los que puede servirse para protegerse y proteger a su prole?, ¿Cuántos rostros recobrarían la serenidad? ¿Cuántos niños(as) crecerían mas fuertes, con madres fuertes y decididas? ¿Cuántos confiarían en una sociedad que confía y se ocupa del otro(a) en el momento preciso?.

sábado, 6 de enero de 2018

¡ADIÓS UNITARIO 2017!... ¡ BIENVENIDO 2018 BINARIO!

Hace un buen tiempo que suelo de tenerme año a año para mirar lo vivido, reconocer al tiempo nuevo y hacer decretos. Desde que la tecnología llegó a nuestras vidas, dialogando conmigo misma y con quienes se detiene a leerlo en un tiempo donde abunda la información y que nos lean es indicio de conexión. Y también, porque la transición entre años, pese a ser sólo una abstracción hecho mito, en la práctica es nuestro modo de ingreso al tiempo sin tiempo. Para mí en particular, es mi modo de aplicar una auto-terapia de desprendimiento y acogimiento, que suelo recomendar en mis terapias.

En mi caso hacer un balance no sólo se remite al siglo XXI, es una práctica que ha extendido el puente de mi vida entre dos siglos, imagino que es igual muchas mujeres y hombres de mi generación. Sin embargo no recuerdo donde empieza ni imagino cuando termine.

Quizás coincida con mi primera década de vida, cuando a los ocho años decidí mis tres “S”, no ser sonsa, silente ni sometida -gracias a una lectura anticlerical y anti oligarca, sin tener idea del significado de ambos conceptos hasta 1996- y que muchas veces está asociado al modo como he configurado mi ser, pensar,sentir, estar, hacer y dar.

Podría ser  que fue a los catorce, cuando deseaba fervientemente que llegara pronto mi mayoría de edad –en aquel entonces era a los 21 años que en realidad es nuestra tercera etapa de vida-, para no volver a experimentar el costo de ser operaria invisible y a salto de mata con impacto desfavorable en el producto de mi trabajo.

Posible es, cuando caí en cuenta que había sumado a mi adolescencia inacabada,  mi rol de madre al lado de mi hermosa bebé, que afectada por estreptococos volaba con fiebres de cuarenta y en mi ignorancia de maternidad improvisada solo atinaba a amanecerme en vela bañándola y llenándola de recetas de mi abuela Rosa mientras oraba para que no se muera. Al cerrar el año,  agradecía los milagros y le pedía a Dios un trabajo lo suficientemente bueno que me permitiera cuidarla, porque creía que nada dependía de mis actos

Pueda ser que sea mucho más adelante, consagrada a ser una existencialista plena a lo Simone de Beauvoir,   racional, lógica, siempre en control, nunca desprevenida, amándome con convicción y decidida a tomar el mundo con mis manos. Donde solo al cerrar cada año, dejaba fluir mi lado intuitivo, femenino y mágico mientras compartía con mi hija, aun niña, el recojo de aquellas plantas mágicas cuyos nombres había aprendido del lado botánico de mi padre Felix un ser sabio y experto en todas las materias, combinado con la magia de mi abuela Rosa y la complicidad de mi madre.

Tal vez sea en los años noventa del siglo XX,  durante la década de crisis de todo que marco muchas vidas y muerte, nuestras vidas y  mi vida de entonces cuyos efectos  se extiende hasta nuestros días interconectándose en aquello que nos hemos trasformado como peruanas y peruanos. En aquel entonces, trenzaba la rabia, resistencia, rebeldía y magia para no morir siendo lo que me negué a ser: sonsa, silente y sometida. A estas alturas el tiempo fundacional ha sido absorbido por la continuidad.

Por eso una vez más en un día mágico 6 escribo para cerrar y abrir. Cierro este primer año en mi mundo mágico conectado con el real, que en principio me costó reconocer, hasta que he aceptado, que se ha conducido tal como debía ser el 2017.

Un año unitario y fundacional, donde se cierra un ciclo, culmina las penurias, se saldan deudas, concretan satisfacciones, se siembra, abona y como quien dice se limpia nuestra casa en todas sus dimensiones para abrirse a un año dual donde hay espacio para hospedar, acoger, ofrecer, recibir, perdonarse y perdonar.

La apertura a lo nuevo y el acogimiento con   madurez que nace del aprendizaje de habernos caído una y otra vez, hasta aprender la lección que no es lo mismo que curar o cerrar heridas, sino amar la cicatriz que es el recuerdo de aquello que debimos vivir, superar y aprender, para ser quienes somos, hacer que nuestro don se exprese, fluya para llegar hacia donde sea necesario, útil e independiente de los caminos que ha de tomar como de los obstáculos que ha de superar.

Y como toda crisis, a las que hoy sé reconocer y distinguir, gracias a haberlas vivido con los ojos abiertos, la mirada atenta, el oído agudizado y la piel siempre sensible. El año uno en nuestro caso fue alterado en su tiempo, desde dos perspectivas: a) cerrarlo antes de tiempo en su tiempo y b) extenderlo más de su tiempo hasta incrustarlo a este año binario.

Me explico, las características del año uno, que se resume en limpiar la casa, para abrirla y acoger el año dos, fue alterado por un anciano que nada tiene de sabio, en cambio mucha torpeza de niño y desfachatez de adolescente que no reconoce errores, menos está dispuesto a asumir los costos, en cambio recurre a todas las tretas, complicidades, intereses y arte de manipulación, para no asumir los costos de sus errores, ya no aprender porque simplemente no le da la gana.

Tampoco le importar a quien arrastre en su caída o a que ser perverso salve lo importantes es salvarse, es como ese juego de las escondidas donde uno salvaba a todas y todos: “¡Ampay salvo a mis compañeros!”, y claro si no eras lo suficientemente hábil, siempre la llevabas. Pero lo jugábamos porque pronto aprendíamos las estrategias, tácticas y escondrijos. En este tiempo no sólo los conocemos porque se nos ha expuesto, así que de nosotros depende el impedir que el juego siga. Y en el plano del universo recordemos que todas las deudas han de saldarse aquí y ahora, dependiendo de nosotras(os) que sea a tiempo, justo y aleccionador para futuras generaciones.

En lo personal, el universo fue magnánimo porque me facilitó embarcarme en una tarea que motivó a colocar en primera a mi lado racional y analítico, colocando a su servicio   mis intuiciones, sensibilidad y magia, y eso fue bueno, me evitó el dolor y la tristeza, aun cuando me inmovilizó el golpe pese a ser esperado, haciéndome más fuerte y asertiva.
Entre amigas(os) donde persiste nuestra preferencia por la confidencia cara a cara, a media luz y algo que partir, he expresado en voz alta que mis constelaciones y nodos espirituales se conectaron, evitando que las contingencias me detuvieran, desalentaran, alteraran o frustraran. He sido capaz de dormir con agradecimiento y una sonrisa, modificando planes para el nuevo día, por supuesto que estos llegaron a ser hasta D con apertura para su flexibilidad según el universo marque el ritmo.  

Así que 2017, año primero de la segunda década del siglo XXI, donde se enseñoreo la era digital, te despido con agradecimiento, porque me permitiste limpiar y disponer mi casa para abrirla al año binario 2018.  En el país y el planeta nos dejaste ver de lo que somos capaces e incapaces, nadie puede acusarte de haber impedido, recubierto la verdad y la composición de los acontecimientos.

Todos y todas, menos los infantes, hemos perdimos la gracia de la ignorancia, las ventajas del desconocimiento y la complicidad de la desinformación, ya ninguna (o) podemos refugiarnos en una pompa de jabón, ni auto consolarnos trasladando la culpa al otro o la otra, debido a que en este tiempo la única verdad es que todo queda registrado y flota. Nada permanece oculto, ni siquiera nuestros sentimientos, porque lo inventamos, posteamos y a pesar nuestro nos descubrimos.

Porque ya no es posible condenar nuestros actos sólo cuando se grafican en el acto ajeno con impunidad del nuestro, ya no sólo son palabras. Estas cuentan si están gravada y/o escritas, así como no hay lealtad entre ladrones, la palabra del cómplice se transforma en la primera prueba junto a las abrumadoras evidencias de aquello que te expone, recuerda, te libera o condena.

Porque importa cada vez más, el costo del bien preciado que se adquiere a sabiendas que pese a su brillo no es oro, ni por su color o textura dure sin corromperse,  más cuando lleva impreso en cada uno de sus a átomos la ambición y debilidad por el poder como su máximo afrodisíaco o placer.

Porque ya no podemos, eludirnos de pagar el costo de nuestras decisiones, aun cuando nuestra expectativa por la posesión y disfrute del bien nos frustre, es nuestra fantasía aquella que nos hizo obviar que su tiempo de garantía es sinónimo de duración en la era digital, donde todo está programado para durar menos de lo esperado y cuasi cerca de lo prometido.

Gracias 2017, porque nos enrostraste la verdad de quien es quién, pese a nuestra práctica circular de borrón y cuenta nueva, así como la política de miente, miente que algo queda. Ya perdió peso, la doble moral cebada en el discurso de representar al pueblo con dignidad, honestidad y verdad mientras la práctica es evidencia de servicio a sus deseos inconfesos y al poder, la dimensión y profundidad de su vileza, robo sistemático, mentira sobre mentira y corrupción que se vende al mejor postor dejando ruborizada a la más experimentada prostituta y frustrado al más hábil ladrón.

De cada quien depende aprender la lección, comerse sus sapos, enmendar y reinventarse. Todas y todos nos reinventamos a lo largo de nuestras vidas, siempre que estemos dispuestos a pagar nuestra factura, dejar atrás todo aquello que nos ate con un pasado y trascenderlo para hallar nuestra misión en este tiempo y dimensión. Con aquello que nos distingue de otros seres: nuestro cuerpo, razón, sentimiento, corazón y alma.
Bienvenido año binario donde siempre estaremos acompañadas(os) con tu alegría, espontaneidad, erotismo, magnanimidad, desprendimiento, disposición,   intercambio, reciprocidad, trueque, cooperación, solidaridad, justicia, perdón y amor del bueno y por su puesto cero impunidad.

A cambio te ofrezco mi mano para asir otra mano, mi hombro para sostener a quien desfallece, mis brazos para acoger al cuerpo agotado, mis pies para seguir creando caminos nuevos, mi regazo para cubrir y cubrirme de inocencia,  mi vientre para engendrar esperanza, mi pensamiento para seguir descubriendo tus misterios, mi corazón para amar y tolerar aquello que no entiendo, mi piel para sentir aquello que no puedo tocar, mis oídos para escuchar con nitidez  y respeto, mis ojos para descubrir tras las tinieblas a la luz y amar sus colores, mi voz para hablar alto y a tiempo,  mi magia para ser punto de sinergia, mis dones para aliviar lo irresuelto, mi alma para agradecer cada milagro,  acoger y facilitar el tránsito entre muchas vidas.

Bienvenido año 2018, toma aliento y vierte tu alforja llena de oportunidades como retos que nos lleven a desplegar lo mejor de nosotras y nosotros. Con la luz en tus manos para mostrarnos que es nuestra elección tomar la senda de nuestros actos y el costo de las mismas, con el plazo claro, que no es para siempre sino sólo 360 días de los que ya me tomé seis con agradecimiento.


lunes, 20 de noviembre de 2017

DE LA SEPARACIÓN DE HECHO AL DERECHO DEL DIVORCIO: los nudos odiosos de hombres y mujeres

Hoy tuve la cereza de la torta, en el taller sobre violencia en la pareja y sus secuelas, facilitado para mujeres y hombres que apuestan por una convivencia libre de violencia, saludable y en armonía.

De todos los temas usuales asociados con las secuelas de la separación de la pareja[1]: sustitución, sobrevivencia, reedición, refundación, reinvención, reincidencia, entrecruce de nuevos amores, regresiones hacia promesas inconclusas (para algun@s involuciones), etc.   Y entre todas las posibilidades, emergió uno poco discutidas y menos trabajada. Se trata de las separaciones inconclusas, aquellas que se detienen o acampan  en la antesala del divorcio legalmente denominada separaciones de hecho.

Estado al que denominaré separación en el limbo, puesto que las vidas de la ex pareja, permanecen unidos en el primer nodo de un matrimonio,  con o sin hijos. Independiente de las múltiples razones, lo cierto es que terminaron en  la separación de cuerpos dentro o fuera de la vivienda. Surge la interrogante ¿Cuál fue su derrotero?: El lógico divorcio, la ilógica aberrante y/o creativa vigencia del matrimonio cuando este no existe.
Depende de cada experiencia, la cosmovisión de l@s involucrad@; sus traumas, valores y prioridades. Y principalmente depende de su modo de amarse y amar al otr@, el grado de sentimientos que se desperdiga tras la ruptura,  las pasiones que  inspiran sus causas: venganza para quien se siente traicionad@, estrategias creativas para recuperarl@,  quien se asume víctima del   arrebato de su “amor” por otr@ ser malvad@,   imaginación para trasladar el dolor y la frustración hacia el ser indign@ de su amor, en quien en  se siente víctima del, así como capacidad de resistencia para torturar y disfrutarlo, por quien siente que perdió el control y la propiedad  del otr@, manteniéndola@ bajo su yugo.

Sin embargo, muy en el fondo de cada caso,  creo que existe un común denominador, y es, el flagelo o  autoflagelo, por haber elegido o haberse dejado elegir como “la pareja” por una dispareja, con discapacidad para perdonar y/o perdonarse   de no haber invertido lo suficiente en el proyecto de dos y/o familia. Y por resistencia a reconocer la inconducta propia y del otr@ que le permita perdonar(se),  recuperando su libertad para rectificar y volver a invertir una mayor dedicación y su mejor esfuerzo en  un nuevo proyecto de pareja o simplemente permanecer sol@ porque descubrió que vive mejor como una ameba.

Aún no   he procesado conceptualmente y tampoco quiero caer en definiciones convencionales. Lo cierto es que existen diversas secuelas de una separación de hecho, que se coloca en el limbo o petrifica en el tiempo sin derivar en el divorcio, sea desde la lógica civilista, racional, social y legal. O en el filosófico, ético y moral de cerrar una experiencia aprendida y aperturar nuevos  procesos, elegir nuevas opciones de vida y compañía. Desapegado de dos seres que independiente de cuánto o cómo se amaron, descubren que no pueden compartir más sus vidas, más allá de la maternidad o paternidad de hij@s en común, con quienes indudablemente no hay divorcio alguno, pueda que en cambio más libertad y oportunidad de entablar lazos más honestos,  específicos y sin mediaciones en calidad y profundidad.

Decidí escribir al respecto, porque es mi modo de observar y pensar en un fenómeno social, que en este caso se produce en el terreno de las relaciones de género. Y porque hoy (13 noviembre del 2017),  tuve cuatro casos de veinte personas que asistieron a la reunión, que se animaron a contar sus experiencias de  separación de hecho, como una violencia suspendidas en el tiempo entre ex parejas, que a su vez secuela de otras violencias entre parejas. Estado  cuyos extremos en tiempo se movía entre 3 y 20 años.

Dos casos de mujeres, donde ambos ex cónyuges habían fundado nuevas familias y ellas también. La primera con un hombre soltero y la segunda con un viudo, en sus términos: “habían re-hecho su vida sin haber arrancado el divorcio a su ex pareja”, lo más notable es que tanto sus ex parejas como ellas tenían nuevos hij@s y que más de una vez había tocado el tema con cierta incomodidad y dolor, porque innegablemente estaban por ambos lados ante una situación de bastardía.
La bastardía, es un estado que se deriva de la situación experimentada por un bastardo, que según la RAE[1], se refiere al sustantivo en femenino o masculino asociado al hijo(a)   nacido en una unión no matrimonial de sus padres. Hijo(a)  de padres que no podían contraer matrimonio al tiempo de la concepción ni al del nacimiento. Hijo(a) ilegítimo de padre desconocido. En tanto que etimológicamente  viene de la voz francesa ‘bàtard’[2], atribuido a quien nace en un granero.  

En el tercer caso, también la ex pareja  habían iniciado una nueva relación con otra persona en estado de separación inconclusa, cuya resolución en perspectiva aparecía aún más compleja por no haberse establecido el divorcio correspondiente por ningún lado. La única “ventaja” que reconocían era no haber tenido nuevos hijos.

El cuarto caso y más dramático, era de un hombre soltero que había convivido 20 años con una mujer separada con quien no tuvo hijos pero ayudo en la crianza de la hija de ella –la cual a la fecha vive en el extranjero-. El, manifiesta que el ex esposo de su pareja, no quiso darle el divorcio, por cuanto solo fueron convivientes hasta el último de los días de ella luego de una penosa enfermedad.

Él se había transformado a la fecha en un conviviente viudo desde hace seis meses (categoría civil inexistente en nuestra legislación civil). Cuando su pareja falleció, él perdió todos sus derechos como tal (ergo la ley de igual trato a convivientes no aplica en este caso), al punto que no pudo decidir dónde y cómo enterrarla porque se impuso el ex esposo, para colmo, ha sido desalojado de la mitad de la vivienda que compró él para su pareja. Por cuanto en las formas y resultados el ex esposo, ha sido favorecido por la ley.

Pregunté si conocían la Ley N° 27495, publicada el 7 de julio del año 2001, que incorpora la separación de hecho como causal del divorcio correspondiente, los cuatro casos me dijeron que no, que cuando en sus inicios recurrieron a consejo legal l@s abogad@s no les orientaron al respecto, centrándose solamente en la patria potestad, afectación de sus bienes y manutención.  

El conviviente viudo, se indignó por la desinformación, afirmó que para él y su ex compañera el mejor acontecimiento de sus vidas fue encontrarse, tomar su oportunidad de ser y acompañarse. Muchas veces quisieron casarse inclusive cuando vivieron una temporada en el extranjero, pero no lo hicieron porque no querían engañarse a sí mismo y esperaban que con el tiempo el ex de su compañera cediera y la dejara libre. Jamás pensaron en las secuelas al final de sus días, hasta cuando a él,  le tocó experimentar no sólo la viudez, sino la privación de no poder despedirla con el rito y la dignidad que acordaron y le correspondía.

Tras el taller reflexioné en los hechos, los derechos y la vida, recordando  que a mediados de los noventa, el movimiento feminista desplegó todas sus estrategias y competencias para que la separación de hecho fuera causal de divorcio, sin que sea necesario apelar a ninguna otra causa entre  los cónyuges: incumplimiento de obligaciones o infidelidad. Logramos arrancar la Ley N° 27495. Sin embargo la norma inaplicada es como si no existiera.

En el país persisten, parejas que se separan sin divorciarse,  ingresando legalmente a la condición de la separación de hecho, que desde mi perspectiva no es otra cosa que el limbo, estado al cual se ingresa y no sale, que existe, pero se prefiere ignorar y no no tocar. 

Alguna idea de la afectación de esta situación a la población, se desprende de la data del censo 2007[3], donde existía un 3% de la población nacional mayor de 12 años en estado civil separada (714 242), en tanto que sólo el 0.5% (114 093) declaraba estar divorciad@. En su interior  la mayoría correspondía a mujeres separadas (70.5%) abriéndose una brecha de 41 puntos respecto a los hombres. En el divorcio la mujer seguía ocupando el mayor porcentaje (59%) siendo la brecha de 18 puntos mayor al del varón.  De donde se desprende que se estaría ante una situación de feminización de la separación.

Las vidas de l@s separados en el limbo,  ingresan a condiciones superpuestas de dos seres que comparten una misma dimensión y a veces hasta un espacio,  sin tocarse, escucharse, verse, tolerarse, menos amarse. Pero que por inexplicables factores enraizados en sus psiquis y voluntad, se empecinan en infringirse mutua tortura manteniendo el vínculo del matrimonio nominal en medio de una realidad de ruptura real evidente de algo que debiera estar unido, ergo se ha  generado un estado de divorcio, sin embargo tal estado sólo es aceptado cuando se ha producido formal y legalmente.

Much@s nos preguntamos por qué mantener un estado absurdo de separación en un estado de limbo, sin embargo para  quienes viven   tal situación pareciera ser que en el fondo lo hacen esperando a ver ¿quién se muere primero?  Algo así como un ave carroñero, para apropiarse de eso que no pudo poseer en vida  -el cuerpo inerte, sin alma ni espíritu que es un cadáver-, para hacer con él lo que le venga en gana, porque le corresponde por derecho y revés.  En nuestra legislación peruana,  nadie más que el ex o la ex tienen derecho a decidir el destino final del cuerpo de quien en vida fue zutano, mengano o perencejo.

Claro el destino final del ser a quién se sometió a los grilletes de un matrimonio indisoluble, es aquel que cabe sólo en  la    imaginación del ex. Y cuando la inercia o el pacto del mutuo acuerdo cesaron, persistió el yugo (dominio u opresión). La muerte de uno, revela en el otro sobreviviente un inconfesable deseo de dignificación necrófila como es revestirse de la imagen simbólica de un estado civil de viudez que en nuestra sociedad pacata todavía tiene “prestigio”, pero que en realidad viene a ser una máscara grotesca de un estado civil, ergo ciudadan@.

Y pueda que las motivaciones de separaciones en el limbo, sea más simple, tal   como sospechan muchas mujeres víctimas de la secuela de estas situaciones –aquellas que son la nueva oportunidad para hombres separados-, no separarse para algunos hombres, es el modo perverso de castigar a otras mujeres más infelices que él (porque justamente lo han elegido  y aceptan su estado),  no volviendo a comprometerse verdaderamente en una nueva relación Podrían también tener la razón los argumentos de hombres víctimas,   que la culpa es de su ex por ser cuasi la “demon or wich” (demonia o bruja), cuya   perversidad es hacerlo     infeliz hasta siempre al no liberarlo. Sea porque nunca llenó sus expectativas, haciendo que pague de ese modo. En el otro extremo, es un bien preciado  de quien no quiere prescindir  en lo material, social (influencia) y culturalmente (poder). Los “más honestos”, suelen atribuir que es el costo de pagar su infidelidad. Todo al respecto es discutible y controversial,   lo dejo en este punto para sus propias disquisiciones. 

Retomando mi perspectiva, afincada en la libertad del ser y hacer, pienso  que podría deberse al miedo infinito de liberarse que  tienen muchos seres, especialmente si se nació atad@ al cordón umbilical, luego a la familia, al que dirán, al marido o la mujer. El miedo a ser libres, en el fondo recubre el pavor a   asumir las exigencias de una emancipación plena y sus consecuencias. Acrecentándose  el miedo ante la posibilidad de volver a equivocarse y perder, porque piensan que amar es ganar, cuando en realidad es sólo amar y aprender.

Y tras 16 años de su promulgación aún existen personas que la desconocen, manteniendo atada su vida a una pareja indeseable sólo por el capricho unilateral de él o de ella a no concluir con la ruptura del vínculo producido en la realidad pero no confirmado legalmente, deteriorando su proyecto de vida y como en el caso referido, enfrentándose al final de sus días a una cruel doble pérdida.

La evidencia fáctica de los vacíos que nos queda por saldar tras una década y media de la existencia de una norma que libera de los caprichos y sentimientos distorsionados de las parejas, demuestran que para relaciones sociales plenas, saludables, transparentes, sólidas y afirmadas, no basta con la conquista de derechos, si los mismos no van acompañado de la difusión, información y formación correspondiente a mujeres y hombres para el ejercicio de los mismos. Ergo no es suficiente tener derechos o ser sujeto de derechos, es preciso ejercer esos derechos de lo contrario seguiremos reinventando ingeniosas formas de tortura entre unos y otros.

Para quienes estamos comprometidos con la defensa de los derechos humanos civiles y apostamos por una vida plena de mujeres y hombres en armonía, estos casos nos muestran que falta mucho por bregar, desde el Estado, la sociedad civil, el movimiento feminista, las organizaciones de mujeres, las instituciones que trabajan al respecto.

Finalmente quiero hacer justicia a aquello que me convenció de publicar este artículo hoy. En medio de su elaboración me encontré con un amigo de hace 27 años, lo conocí ya separado y con cuatro hijos. Hoy me cuenta que sigue separado, es decir en el limbo, sólo que tiene nueva  pareja y  dos nuevos hermosos hijos que lo llenan de orgullo y satisfacciones.

Durante nuestra conversa  me contó  de un pariente suyo que falleció, bajo sus mismas condiciones. La ex esposa, secuestró el cadáver y no dejó que nadie supiera donde lo velaron sin permitir que   siquiera su madre lo despidiera, abriendo con ello una brecha de dolor en su la familia. 
Lo miré y con el derecho que me tomo de la amistad para decir las cosas por su nombre y a mi estilo que suele ser sin anestesia, le pregunté que estaba esperando, lo conminé a cerrar etapas.  
Y por mi lado, prometí que publicaría este escrito, tanto para poner el dedo sobre la llaga así como proveer de información que puede ser de utilidad para más de uno de mis amigas y amigos que ejercen o padecen esta situación y se hallan envuelto en estas prácticas, de la que no se habla pero todos saben.
Y tras 16 años de la  promulgación de la Ley Nª 27495, aún existen personas que la desconocen, manteniendo atada su vida a una pareja indeseable sólo por el capricho unilateral de él o de ella a no concluir con la ruptura del vínculo producido en la realidad pero no confirmado legalmente, deteriorando su proyecto de vida, y como en los casos referidos, enfrentándose al final de sus días a una cruel doble pérdida.

La página pública y formal que tod@s debemos conocer, http://www.gob.pe/436-separacion-y-divorcio
Un breve artículo para quienes no dan para tanta lectura, http://www.derechovirtual.com/uploads/archivos/e1n4Suarez.pdf
Alguna data sobre Violencia Conyugal Física en el Perú https://www.inei.gob.pe/media/MenuRecursivo/publicaciones_digitales/Est/Lib0687/Libro.pdf 
Un caso complejo como referente de análisis de las bondades y límites de la causal http://dike.pucp.edu.pe/doctrina/civ_art45.PDF y uno menos complejo http://spij.minjus.gob.pe/juris/civil-pdf/civil-01368.pdf
Dos páginas con modelos de demanda de divorcio… http://www.divorciosporinternet.com/modelo-de-demanda-de-divorcio-por-separacion-de-hecho, https://corporacionhiramservicioslegales.blogspot.pe/2013/04/modelo-de-demanda-de-disolucion-de.html



[1] http://dle.rae.es/?id=KOGiy39
[2] https://verbiclara.wordpress.com/2013/08/30/origen-de-la-palabra-bastardo/
[3]INEI (2007) Censo Nacional XI de Población y VI de Vivienda  http://censos.inei.gob.pe/cpv2007/tabulados/#  

martes, 18 de julio de 2017

PRISIÓN PREVENTIVA DE LOS HUMALA HEREDIA



El 13 de julio, el juez Richard Concepción Carhuancho (J-RCC), dictaminó la prisión preventiva del ex presidente[1] Ollanta Moisés Humala Taso (55 años de edad) y la ex primera dama Nadine Heredia Alarcón de Humala (41 años de edad), para cuya ejecución inmediata se presentaron ambos sentenciados, antes de ser detenidos por la Policìa Nacional. Sus dos hijas adolescentes, Yllary de 15 y Nayra de 13 años de edad, se encuentran en Illonis, Chicago de los Estados Unidos[2]. En tanto el cuidado de su hijo Samin de 6 años de edad, es desconocido, se hallaba con ellos hasta antes de ser encarcelados.

Sería justamente el viaje de ambas hijas[3] aquello que se transformó en el factor movilizador de la fiscalía[4] para demandar y obtener en sólo tres días la prisión preventiva de los Humala Heredia, tras una larga audiencia de 14 horas al cabo del cual se dictaminó encarcelamiento para ambos por 18 meses, salvo que en los siguientes 3 días hábiles, sus abogados demanden la revisión de la sentencia en el tribunal superior, para que se ratifique o revierta.
Más allá de cuanto pueda probarse o no, las acusaciones como delitos -sea como pareja e individualmente-, implica que mientras esto no suceda tienen el derecho a un debido proceso, cuyo resultado los lleve a ser sentenciados o liberados.

La prisión preventiva que se adelanta a ese resultado, es no sólo controversial, sino políticamente desacertado, puesto que los victimiza y crea el sustento que da contenido al argumento de persecución política y ausencia de garantías para un debido proceso. Ya planteado por el ex presidente Alejandro Toledo, hoy prófugo tras una sentencia similar desde febrero (2017), los últimos hechos pareciera darle la razón ante la percepción internacional, al punto que el Estado peruano aún no ha logrado, disuadir o presionar que el Estado norteamericano para que lo extradite.

Según los expertos y entendidos, los sustentos esgrimidos por el fiscal Germán Juárez Atoche (F- GJA) y la decisión del J-RCC, no sólo serían endebles sino que no logran satisfacer completamente a las exigencias de las medidas tomadas[5]. En tanto que los voceros políticos y líderes de opinión se dividen en posiciones a favor y en contra. En el caso del ciudadano de a pie, sucede otro tanto, moviéndose su percepción entre los extremos de celebración y lamento.

Pero todos coinciden, en la sorprende y novedosa celeridad del Poder Judicial (PJ), jugando con las expectativas individuales de esperanza por el cambio y eliminación de corrupción en el sistema de justicia, en tanto se acentúa la incredulidad y sospechosa, mientras nos preguntamos: qué está sucediendo en el trasfondo para distraernos de este modo a todos(as), con un talk show de alto nivel y en cadena. La mayoría somos conscientes que en nuestro país, aquello que distingue al PJ es su escasa velocidad para ejecutar cada uno de los procesos y procedimientos.

Lo sucedido con los Humala Heredia, se produjo paralelamente a mis días de concentración de trabajo silente, que de un tiempo a esta parte suele ser multimediático: música en casi nivel rem, noticieros televisados en bajo relieve y escritos como análisis en la laptop, por cuanto, estuve siguiendo el proceso en como telón de fondo inmediato a mi principal actividad.

Provocándome de tanto en tanto, como sin duda sucedió con muchos de ustedes, algunas interrogantes: ¿Qué es lo que sucede entre bambalinas?, ¿Qué es aquello que el titiretero o la titiretera quiere que pensemos?, ¿Qué escenario se está construyendo para el 28 de julio? Sabemos quienes pierden con una prisión preventiva legalmente accidentada, pero no sabemos en detalle y claridad ¿Quienes ganan? ¿Qué ganan? Y ¿Cuánto ganan?

Cuando la sentencia se produjo, observé en silencio de red, las primeras reacciones. Como suele decirse en prima, aquel acto reflejo que muestra inconscientemente nuestras emociones, en tanto yo procesaba las mías. Mi espacio de recepción en Facebook desbordó, la mayoría celebraba irreflexivamente, concentrando el desdén y acusación en Nadine Heredia, cuando en realidad, si de condenar se trata, la responsabilidad política y legal vendría a ser de Humala si se sentenciara delito.

Observé una vez más el modo como se lapida a una mujer como Nadine Heredia, especialmente desde sus congéneres, argumentando que tuvo el atrevimiento de no contemplar protocolos victorianos, que debió vestir jeans y poliseda, y no hacerse de sedas, estilos y marcas cuando fue primera dama, lo más doméstico del argumento es restregarle el modo como: “cambió el chocolate sublime por el Godiva”, perdiendo así todo peso político las críticas y cuestionamiento, para colocarse en el terreno del arribismo, cuestionamiento personal a quien es ambicioso(a) y progresa sin mostrar escrúpulos por los medios, siendo la prioridad el poder, la fama o riqueza sin importar a quien se pise o destroce.

Acusar y condenar a Nadine Heredia por arribista, como argumento político, hace que la opinión pública se aproxima peligrosamente a los fundamentalismos que rechaza. El arribismo no es novedoso, por cuanto el de Heredia, no es el primero ni será el último en el país, los hay por todos lados y niveles, sólo basta mirar con atención. El arribismo del que se le acusa y condena, sienta sin duda jurisprudencia ante el tribunal del pueblo, no así en el terreno legal del poder judicial. Hasta donde conozco, ningún poder judicial ha condenado a nadie por el delito de arribismo, pese a que en el país existe una gran proporción, en cada uno de nuestros cuatro costados. Al punto que nos incomoda, cuestiona y motiva la revisión de nuestra ética, lo que lleva a confundirlo como fundamento político, en tanto que otros(as) sólo tomamos distancia de los(as) arribistas por ser repulsivo para las buenas costumbres, valores y moral.

También verifiqué que las opiniones con mayor inquina se concentraban en que no mantuvo las formas y “su lugar” como primera dama y presidente, nadie perdona a Nadine y Ollanta, la re-conceptualización del puesto de consorte de un presidente, por el de pareja presidencial, el ejerciendo abiertamente un rol en ese tono a lo largo de su gobierno se ganó el alias de “cosito” y ella “la jefa”, “la presidenta”, “la usurpadora” hecho que me lleva a preguntar:
¿Acaso no es la mayor ambición del feminismo revertir la posición y condición de subordinación de la mujeres? ¿Acaso no se apuesta por que las mujeres lleguen a tomar decisiones en los máximos espacios de poder en la línea de igualdad de derecho de las mujeres y hombres? ¿Acaso los esfuerzos principales buscan hacer que los hombres sean sensibles al género? Si esto es así, ¿Por qué tanto rechazo?, ¿Por qué usurpación?, ¿Por qué desplazar el adjetivo colonial de saco largo por el de cosito? Con tal pasión y agresión creciente desde la perspectiva femenina. Allí es donde me permito afirmar, que uno es el discurso de igualdad de género y otro es el ejercicio práctico del mismo.

Tras mi contemplación de reacciones, hallé en el muro de mi amiga Rosa María Gastañeta Alayza (14.07.16 / 0.13 h.) la reproducción de un post:
"Duro golpe para la credibilidad de la justicia peruana. No se trata de defender a los Humala, que en su momento, podrán ser condenados, pero dar prisión preventiva a quien cumple con asistir a las constantes convocatorias del fiscal, es un abuso, y, encima cruel, respecto de un niño de 7 años. Una vergüenza." (Francisco Belaunde Matossian)
Era el primero que enfocaba los hechos desde la justicia y la conducta de los Humala Heredia, provocándome una reacción también emocional:
“Luego del veredicto, tuve una sensación de estar frente a una escena donde la luz enfoca a los actores del centro, colocando en penumbra la escena completa. Y que veredictos como este, sólo ratifican que para asegurar el debido proceso, ha de recurrirse a medios indebidos como el empleado por Toledo y García”. (Catalina Salazar Herrera, 14 de julio a la 1:51)
Mi post generó 14 reacciones indistintas y 21 like a la reacción de mi amiga que no cuestionaban la resolución como lo hacía F. Belaúnde, sino que lamentaba que existieran “fugitivos” y “sospechosos” entre ex presidentes y ex alcaldes. Así que añadí:
Es lamentable, pero el PJ [Poder Judicial] está impregnado de una serie de factores tan complejos que sigue siendo un embudo, para unos ancho y corto para los muchos. Independiente de que sean o no culpables Heredia y Humala tienen derechos y conducta de enfrentar sus responsabilidades. Esto muestra que a personas comunes y corrientes primero se los encarcela diez años y luego se declara inocente, el mundo al revés, porque no se le aplica el beneficio de probar la culpabilidad sino demostrar la inocencia”. (Catalina Salazar Herrera, 14 de julio a la 2:00)

Mi segundo post coincidió con reacciones, que si bien estaban de acuerdo con el comentario, ratificaban el modo en que estaba enraizada la idea distorsionada de justicia, donde el acusado o acusada, pruebe su inocencia y no como debiera ser en un estado de derecho que el sistema pruebe culpabilidad, que me llevó a una reacción más extensa que reproduzco a continuación, para compartir en la línea de reflexión que reclaman por posturas menos vicerales.

“El estado de derecho implica que al acusado(a) de un delito, es el Estado quien debe probar la culpa ante el cual debe defenderse y no al revés, por ello la importancia de la custodia de las pruebas y la investigación, así como un alto grado de calificación y profesionalismo de los operadores.
Lo contrario significa que basta ser acusado(a), para ser encarcelado y luego demostrar inocencia. Sucede que en el Perú nos hemos acostumbrado a esto último, al punto de haberlo asumido culturalmente como algo natural. 
Cuando digo que el PJ es complejo, no sólo me refiero a su sistema, procesos, operadores y los recursos, sino al modo de aplicar justicia, no sólo es el caso de los Humala Heredia, sino de miles de presos que hasta el momento esperan juicio algunos(as) con más de 10 años de prisión preventiva. Una razón por la cual los culpables hacen uso de mecanismos perversos donde se sitúa la corrupción, para "demostrar inocencia", basta mirar sólo un indicador, en estos casos, no hay demanda al Estado por daños y perjuicios. Cuando esto se produce, la demanda, el inocente lo hace por el resarciendo de su honor -lo que de ningún modo le devuelve la vida arrebatada-.
“Los casos más sonados, transformados en escándalo, son los que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) o el Tribunal de Justicia Internacional (TJI) ha sentenciado y producido exigencias para el Estado peruano, provocando que el ciudadano(a) de a pie cuestione y se resista, mientras líderes políticos y autoridades se aprovechen de esa situación para negarse y hasta amenazar con retirarse de esta instancia internacional. Actitud que en los noventa, nos transformó en país paria como garante del debido proceso ante instancias internacionales, debiendo el presidente transitorio Valentín Paniagua (2000) invertir esfuerzos mayores que otro presidente de la región, en iniciativa, voluntad y compromiso durante la elaboración del reglamento de la CIDH[6], detalles que conozco profusamente porque acompañé más de una tesis Mag. en Relaciones Internacionales sobre el tema.
Retomando el comportamiento de otras autoridades investigadas, tal como van las cosas pienso que es sumamente riesgo colocar la mano al fuego por alguno(a), solo hay que hacer uso de pensamiento lógico, triangular algunos hechos y esperar. Cierto hay motivaciones y factores políticos que se entreteje, mueven los hilos de la justicia y hasta enrarecen el panorama, pero de lo que estoy segura, es que nada puede mantenerse en el tiempo, más cuando hoy no hay secreto alguno entre cielo y red. 
Yo no voté ninguna de las dos veces por García, Fujimori, Toledo ni Humala, aun cuando fui vista con sospecha en su momento por quienes hoy los lapidan y rasgan las vestiduras. Sí movilicé y me movilicé por Susana, pero no tuve mucho que esperar para darme cuenta que una es con guitarra y otra con cajón, por ello le envié una carta pública y me alejé totalmente [de la esperanza que sería la mujer que marcaría la diferencia en el gobierno local]-también bajo sospecha-, antes que juramentara como alcaldesa. En todos los casos creo que se debe demostrar las responsabilidades y asumir sus consecuencias porque no sólo se trata de un delito, sino de la estafa a la fe y entrega de confianza y poder popular en manos de quienes hicieron todo lo contrario a sus promesas. Alejandro Toledo y Alan García, deben hacer frente al costo de sus acciones, más temprano que tarde. Al igual que Susana Villarán y Luis Castañeda, si el PJ identifica razones para ello.
La coherencia en nuestra vida es hacer aquello que predicamos, y, cuando nos toque o asumamos gratuitamente enjuiciar al otro(a), lo mínimo que nos debemos a nosotros mismos(as) y al otro, es aplicar similar indicador de balance a todos, lo contrario es doble moral. E insisto en la necesidad de una vigilancia ciudadana responsable a todos los niveles para no llorar sobre leche derramada, una vigilancia oportuna no sólo se transforma en prueba sino que es disuasiva, especialmente cuando la corrupción se ha enquistado en el sistema como es nuestro caso.
Y casi me olvido como todos, no podemos sesgar la realidad delincuencial de los mandatarios, tenemos tres presidentes sentenciados ergo hallados culpables de delinquir: Augusto B. Leguía (murió en la cárcel), Alberto Fujimori (25 años) y Morales Bermúdez (cadena perpetua). Dos con orden de detención: Toledo y Humala, en tanto que solo el segundo está detenido. Tres prófugos ayer y hoy: Fujimori, García y Toledo. Por primeras vez una primera dama encarcelada re-conceptualizada como pareja presidencial: Nadine Heredia, pero no la única perseguida simbólicamente por sus “atrevimientos”, no olvidemos a la Mariscala[7], la cuzqueña Francisca Zubiaga y Bernales[8], esposa del presidente Agustín Gamarra que se salvó de la cárcel al huir y morir exiliada en Chile.” (Catalina Salazar Herrera, 14 de julio a las 21:57)

Las reacciones que tuve en el muro de mi amiga, fue seguido de la entrega televisada de la pareja presidencial a las instalaciones del PJ tras el dictamen de su encarcelamiento, no pude dejar de pensar en la mujer y el hombre, en el padre y la madre de tres hijas(o), en el hijo y la hija de unos padres.

Pensé en cuan perversa suele ser el ejercicio de la política, cuando sus costos atraviesan todas las dimensiones de sus actores y los aniega, especialmente para quienes no están vacunados contra los efectos del poder, que permita asumirlo sin embriagarlos, Nadine Heredia se asomó a él con sólo 31 años y Ollanta Humala a los 45, con la única experiencia práctica de política de su sublevación y ser agregado cultural en Francia, ahora sabemos parcialmente que no fueron los caminos de una militancia partidaria sino la influencia de otros poderes e interés aún desconocidos que los llevaron al poder.

Y miré en esa pareja, aun joven, enfrentar las consecuencias de sus actos con entereza: no se resistían, tampoco huían, se ocultaba o asilaban como muchos otros presidentes perseguidos en su momento. Y sólo por ese acto, los percibí respetables en contraste con quienes tomaron la vía de la cobardía.

Es posible cuestionar el rigor de los procedimientos del PJ, pero lo incuestionable es que la situación viene a ser el costo de ser y hacerse político(a), accediendo al máximo poder en el país, sin antes haber transitado por la construcción de una militancia democrática, transparente y de rendimiento de cuentas, carente de una red de soporte y control que los respalde ante los riesgos del poder, carentes de la mística de servidor público en el concepto más profundo: ponerse al servicio de y no servirse de.

La pareja presidencia, ingresaban a una nueva etapa de su vida, luego de la cárcel no hay vuelta atrás, se reinventarían para el futuro o sucumbirían a los costos de hacer sido presa fácil de sus ambiciones, las tentaciones y los hilos de la corrupción trasnacional. Pagarían o reaprenderían de los costos de su inexperiencia para proyectar su futuro y el nuestro, más allá de los intereses del capital y el mercado.

Recordé lo que discutíamos a fines del 2016 con las mujeres de Nuevos Caminos, sobre el liderazgo, política y el poder, que está en la base de sus sueños de formación a nuevas líderes. Anotábamos como principal reto, la necesidad de una mirada honesta de la propia práctica para hallar la piedra filosofal y como desaprender las viejas prácticas de apropiarse, ejercer y responder a las exigencias del poder, sin un ápice de cambio, al punto que cuando se está en el poder, es él quien marca las pautas, siendo reproducido sin cuestionarlo más, menos aún modificarla. Porque entre una u otra cosa no nos hemos detenido a pensar cuál es el modo de ejercer poder y autoridad que nos asegure igualdad, redistribución, transparencia y radicalizacion de la democracia.

Los vi a ambos en su condición de ser el hombre y la mujer con el mayor poder entre el 2011 -15 en el país, y me dije, cuán lejos estamos de dejar de ser una república bananera, con aires de modernidad en el consumo y el mercado, pero pacata y conservadora hacia adentro. Atrapados en viejas prácticas de clientelismo, compadrazgo y transacción de todo hasta de los sueños. Infantes en las relaciones políticas, interpersonales, culturales de clase y poder.
Pueda que el apresamiento de ambos sea ratificado en la siguiente instancia, en ese caso no necesitarán hacer campaña, puesto que un país con predilección por el melodrama, los volverá a elegir tras el escándalo, sólo basta vernos en el espejo de Fujimori. En ese caso, no puedo dejar de pensar en el costo de la maternidad y paternidad, así como el impacto de este hecho en la vida de su hijo e hijas.
Pueda que salgan libres, de ser así será un gran revés para sus adversarios políticos, porque han logrado concentrar y mantenerse en el centro de la noticia durante estos 17 días, más de lo que ha logrado ninguno de los partidos políticos.




[1]    28 de julio de 2011 – 28 de julio de 2016
[2]    EC. (12.07.2017 / 01:49 pm).Fiscal: Humala y Heredia abrieron cuentas a nombre de sus hijas con dinero ilícito. Para la fiscalía, cuentas corroboran la tesis que la ex primera dama disponía de parte de ese dinero para sus fines personales, Diario el Comercio: Lima. Recuperado de http://elcomercio.pe/politica/fiscal-ollanta-humala-nadine-heredia-abrieron-cuentas-nombre-hijas-dinero-ilicito-441739
[3] AgendaPais.com. (1julio 2017) Nadine Heredia confirma viaje de sus hijas a EEUU, país de donde regresarán en agosto http://agendapais.com/politica/nadine-heredia-confirma-viaje-de-sus-hijas-a-eeuu-pais-de-donde-regresaran-en-agosto/
[4]    EC. (04.07.2017 / 08:45 am).Fiscalía acudió al colegio de las hijas de Ollanta Humala y Nadine Heredia. Fiscales adjuntos del despacho del doctor Germán Juárez, que investiga a la ex primera dama, solicitaron información sobre el viaje académico de las menores, Diario El Comercio, recuperado de http://elcomercio.pe/politica/fiscalia-acudio-colegio-hijas-nadine-heredia-439485
[5]    BBC Mundo. (14 julio 2017). Perú: ¿por qué dictaron orden de prisión contra Ollanta Humala y Nadine Heredia? ¿Y qué tienen que ver con el escándalo Odebrecht y Venezuela?, recuperado de http://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-40604896
[6]    Ramírez Varela, Lilia. (Lima, 17 de agosto del 2006) A propósito de la propuesta de retiro de la Corte interamericana de DDHH. Recuperado de http://www.justiciaviva.org.pe/.../2006/08ago/17/nota03.htm
[7] Nuñez, Claudia. (2005). De armas tomar: La vida de Francisca Zubiaga y Bernales antes de la presidencia. Lima: UNMSM Recuperado de https://www.academia.edu/26468660/De_armas_tomar_La_vida_de_Francisca_Zubiaga_y_Bernales_antes_de_la_presidencia
[8] Valdelomar, Abraham. (1915) La Mariscala. Lima: Editor digital: Titivillus, 206 p. Recuperado de http://assets.espapdf.com/b/Abraham%20Valdelomar/La%20mariscala%20(2027)/La%20mariscala%20-%20Abraham%20Valdelomar.pdf