sábado, 5 de diciembre de 2009

DESARROLLO URBANO, expansión de cemento, brea y algún adoquín

Admiro el trabajo de los pueblos pujantes que han hecho del cinturón de Lima Metropolitana un lugar donde habitar y no solo pernoctar, aun cuando las distantes y largas jornadas de trabajo les dejen escaso espacio para ello. Por eso no es extraño que hagan de los fines de semana y feriados momento intenso de sus vidas como si fuera el último de sus días.

Tan difícil de comprender por quienes cuentan con espacios permanentes e inadvertido, sea porque tienen el privilegio de desarrollar sus actividades principales (trabajar, estudiar, producir, etc.) rodeado de parques, árboles y oxigeno purificado por la presencia de gran vegetación. Será por eso que cuando me tocan jornadas de permanencia en la universidad, disfruto del ambiente con sentimientos encontrados, de plenitud y agradecimiento a la vida por la oportunidad de respirar y ser parte de uno de esos espacios privilegiados que quedan en la mega ciudad de Lima y con algo de vergüenza ajena, porque al mismo tiempo no puedo dejar de pensar que la mayor parte de limeños(as) viven el día a día, en espacios de metro cuadrado, algunos(as)respirando oxigeno enrarecido sea por la polución y hacinamiento.

A veces me sorprendo detenida en cosas inadvertidas, por esta conciencia cuasi física de reducción constante de espacios oxigenados, aliviada  cuando mi trayecto elude las grandes arterias contaminadas. Y cuando no es posible, miro con esperanza de niña, que los arbustos sembrados por cada gobierno local de turno en Lima cuadrada, logren algún día, alcanzar la condición de árboles amenguando el nivel de contaminación y modificando el paisaje gris de Lima.

Pueda ser que esta actitud me permite perder la costumbre  usual de cerrar la mirada entre el ir y venir cotidiano, advirtiendo los cambios de ambiente, como sucede con la asertividad de quien decidió sembrar sauces y no otro árbol en las avenidas mas contaminadas. El sauce llorón o no, es una de esas especies que de temporada en temporada, se desnuda todo, despojándose de aquellas hojas oscurecidas de smog para renacer con el tiempo y mantener su verdor. Situación a la que ha renunciado los escasos árboles fantasmagóricos tan antiguos como las calles o parques que los acogió en tiempos menos densos y contaminados, pero que a pesar de su revestimiento de plomo, azufre y óxido de nitrógeno [1] no han perdido la majestuosidad y sobreponers a la humillación de ser depositario de la micción de zoquetes de dos y cuatro patas, el improperio de la indiferencia de todos(as), especialmente de quienes tienen entre sus funciones el ornato público.

Junto a cambios esperanzadores,  suelo identificar, hechos increíbles muchas veces ilógicos, atentatorios al medio ambiente ya en crisis de la Gran Lima, que he tenido como tema de agenda con mas de un(a) amigo(a) ambientalista, para asistir a su evaporación con desencanto, puesto que de Lima como ciudad nadie se ocupa, salvo aquellos vecinos(as) tocados directamente y que han logrado llamar la atención de los medios de comunicación como sucedió con la calle Hernán Velarde en Santa Beatriz[2] el parque Locuto en Surco[3] y el del Pentagonito en San Borja[4] que hizo retroceder los planes de "crecimiento urbano” de las autoridades.

Algunos de estos hechos, saltan a la vista, especialmente de quienes somos peatones, como sucede con los “cambios” que se han producido en muchas avenidas, plazas, parques y calles de Lima entre fines del siglo pasado e inicios del presente, muchos sin duda para bien pero otros tantos, especialmente en este últimos tiempo, se han tornado en ofrendas al concreto y rito inagotable al asbestos que pervive en el cemento.
Uno de los tantos que llamó mi atención fue la remodelación de Av. Arequipa, será porque antaño me placía recorrer por su berma central debido a su amplitud, aroma y protección de sus árboles[5]. Las “refacciones” se iniciaron durante el primer trimestre del 2008, coincidiendo con mi estadía a la siniestra de Radio Nacional, desplazandome hasta tres veces por semana, por el borde del cerco que impedía el ingreso al parque Cervantes, cuya belleza de bancas coloniales con arcos de bugambilias y jazmines estaba vedado para el público, aun así me complacía ver las hermosas rosas cautivas y plantas ornamentales, tanto así,  que fue marco de un escrito, cuando me descubrí atrapada entre el sopor del verano que no partía, el bullicio de las aves y ese paisaje que lamentaré una vez mas no haber registrado en una imagen del recuerdo.

Volviendo a la remodelación de la Av. Arequipa, asumí que seria cierto la anunciada ampliación de la pista principal como alternativa al caos vehicular “En la avenida Arequipa -cerrada desde 28 de Julio hasta Enrique Villar en sentido norte-sur- se ampliará la pista de 5.70 a 6.30 metros y se colocará semáforos en las 34 intersecciones de la vía” [6], paralelo a los trabajos en la Av. Petit Thouars y entre ambas avenidas, el del parque Cervantes. De modo que ante la necesidad innegable de la fluidez en la circulación automotriz, asistí con tristeza y resignación a la deforestación de nobles árboles que desde indicios del siglo XX cobijaron bajo su sombra a varias generaciones.

Grande sería mi sorpresa cuando, descubrí que no sólo la floresta de la berma central de la Av. Arequipa sería afectada, junto con las rejas del parque Cáceres habían desaparecido las hermosas rosas, los bancos coloniales, muchos árboles y en su lugar se había pavimentado, si no es un error de registro “se había pavimentando” seis veredas de cuasi tres metros que laceraban el cuerpo del parque desde sus cuatro esquinas y el centro.

A ello se sumó que la anunciada ampliación de la Av. Arequipa, sólo fue un sueño de verano con un desagradable despertar. En su lugar se habían ensanchado la pavimentación de la berma central “La funcionaria destacó, asimismo, la ampliación de la calzada de la vía de 5.70 a 6.30 metros” [7] . Mas allá de la impunidad con que se devastaron los árboles emergieron inconsistencias entre el anuncio, diseño y la ejecución [8] . Es decir que a lo largo de 6,082.47 metros sometido a remodelación, se mantuvieron las mismas bermas centrales con algunos centímetros de mas cemento añadido, un acabado de cruces mas amplio de cemento salpicado por adoquines. De los semáforos inteligentes ni que decir. Habrá que esperar que expertos en cálculos y costos de estos menesteres nos ilustren de cuando se “ahorró” de los 5’506,99 destinado a la construcción de las Av. Arequipa, Arenales y Petit Thouars y los 12,000 correspondientes al puente de Javier Prado con Arequipa [9] si estos fueran en realidad los montos ejecutados.

De aquello que fue la AV. Arequipa, quedan algunos registros para el recuerdo [10], no dejaremos de añorar quienes preferimos una ciudad jardín que la el sembrado de cemento,  sin duda pasará a la historia,  que la remodelación fuera de la mano de un alcalde que como experto en desarrollo urbano y gestor local es un buen médico, salvo que las decisiones arquitectónicas las haya sometido al costo de ensayo error, de un proyectado de tesis de arquitecto, que pronto habrá de sustentar, si en verdad  es necesario para hacerse médico-arquitecto en la prestigiosa e incontrastable universidad que lo auspicia, donde en honor a su alias "el muertito" no se le vio en ninguna clase académica de una carrera que dura cinco años. Ante este regicidio del medio ambiente escuálido de Lima, me asalta la interrogante de ¿Cuánto mas de cemento es necesario para hablar de desarrollo urbano? algunos han levantado la voz y generado sugerencias[11] sin embargo no han logrado movilizar a nadie.

Tampoco me sorprende que esta vocación por el cemento tienda a extenderse del centro de la ciudad hacia la periferie, para devastar los escasos espacios verdes que algunos distritos populares poseen como sucede con San Juan de Lurigancho y Comas. En el caso del primero, que ha venido resistiendo al cambio de zonificación y destino comercial del parque Wiracocha desde hace mas de cinco años, ha mantenido su propiedad en manos del municipio local hasta noviembre del 2008, periodo en que un gobierno local de la misma línea que Lima Metropolitana abdicó a sus derechos, pese a la resistencia poblacional[12] . En el caso de Comas que cuenta con el mismo perfil de la relación entre burgomaestres, pareciera que la suerte está echada, pero a diferencia de los(as) luriganchinos(as), s comeños(as), no están dispuestos a dejarse desbordad en silencio por un proceso de desarrollo urbano que sacrifica el hábitat.

Cuando inicié esta reflexión, manifestando mi admiración a los pueblos pujantes de Lima, lo hice refiriendome a su capacidad de extraer vida a la roca y arena. Haciendo suyo un espacio construido con sus manos y sudor, por eso no hay lugar a dudas, que saldrán al frente y darán la batalla, reafirmando prácticas de no rendirse ni renunciar jamás, a aquello que se ha establecido como una necesidad reconocida y un derecho conquistado, esto es lo que sucede con el parque Sinchi Roca de Comas, donde ya el Municipio de Lima ha tomado un espacio para el paradero del metropolitano, que parece no haber sido suficiente, al punto que se vienen talando los árboles como lo denuncia la comisión de desarrollo ambiental en su carta del 17 de noviembre del 2009 dirigida al alcalde distrital.

Esperemos que nuevamente los pueblos corajudos y afirmados cuyas mujeres y hombres ven mas allá de los procesos de desarrollo mediato en la necesidad de construir y caminar hacia un desarrollo holístico en tiempos donde no sólo comeños(as) están amenazados, sino cada habitante de los distritos del cono norte, Lima centro, el Perú y el mundo por la destrucción indiscriminada de los bosques de la tierra y con ello la reducción de su capacidad de respirar y dar vida a las especies entre los que nos encontramos.
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[1]http://www.larepublica.pe/archive/all/larepublica/20060721/pasadas/13/78012, http://www.iriartelaw.com/apc-aa-iriartelaw/img_upload/80fbc41a7158c9c9b59314f28f167fb1/Bolet_n_MA____A_o_II__N__05._Enero_de_2009_1.pdf
[2]flickr.com/photos/13182609@N05/3705488407/),
[3]http://peruesbabel.wordpress.com/2008/12/04/areas-verdes-de-surco-en-peligro/
[4]http://peru21.pe/noticia/225805/zonificacion-permite-construir-centro-convenciones-pentagonito
[5] (http://www.arkivperu.com/blog/wp-content/uploads/2009/06/av-arequipa-en-1921.jpg
[6]http://peru21.pe/impresa/noticia/cierre-arequipa-petit-thouars-genera-congestion/2008-02-19/115672, http://elcomercio.pe/edicionimpresa/html/2008-02-18/desde-hoy-cierran-tramos-av-arequipa-y-petit-thouars.html, http://www.andina.com.pe/Espanol/Noticia.aspx?id=SUj3DNU4fCY=, http://diariolaprimeraperu.com/online/noticia.php?IDnoticia=10630
[7]http://lima-metropolitana.blogspot.com/2008_06_01_archive.html
[8]http://www.youtube.com/watch?v=eRkm1ZZFmcU
[9]http://www.emape.gob.pe/descargas/presupuestal/OBRAS2003-2005.pdf
[10]http://www.youtube.com/v/IOI6rcuQdfc&hl=en_US&fs=1 src="http://www.youtube.com/v/IOI6rcuQdfc&hl=en_US&fs=1&"
[11]http://evillan.blogspot.com/2008/04/ideas-para-el-sr-castaeda.html
[12]San Juan de Lurigancho: Parque zonal Wiracocha en manos de Castañeda Lossio,
http://senalalternativa.blogspot.com/2008_10_01_archive.html

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